Lo veo indispensable para lograr y mejorar la inteligencia colectiva. Otras veces lo entiendo como mejora continua interpersonal. También escuché que le dicen sinceridad, honestidad… pero estoy convencido de que no conviene que esa honestidad sea brutal.
Hablo (bah, escribo) de la retroalimentación o, en inglés, feedback.
Todas las personas somos diferentes y en nuestra necesaria interacción, nos damos cuenta de que los otros piensan y/o hacen las cosas distinto de como nosotros las hubiéramos pensado y/o hecho. No necesariamente mejor o peor: distinto.
A la vez, muchas veces no somos conscientes de que afectamos negativamente a quienes nos rodean. Por ende, como no nos damos cuenta de ello, no tenemos la posibilidad de cambiar nuestro proceder.
Lector, lectora, a vos te escribo:
Si considerás que alguien puede mejorar en algún aspecto (profesionalmente, técnicamente, socialmente…) y eso te afecta de algún modo, no te quedes con las ganas de decírselo: conversá al respecto de tu inquietud directamente con esa persona. Seguramente necesita tu feedback.
De igual forma, si todavía no le preguntaste a algún otro (colegas, amigos, familiares, compañeros) acerca de vos (tu proceder, tu trabajo, tu forma de comunicarte, tus modos, etc), aprovechá algún momento -cuanto antes, mejor!- y pedí feedback. ¡Vos también necesitás feedback!
Para facilitar estas conversaciones, que suelen ser complejas (toca decir y escuchar cosas que en general ameritan pensar y charlar en profundidad, elaborarlas internamente, reflexionar), sugiero utilizar algún artefacto (pizarra, anotador, guía, canvas).
Con mi amigo y colega Hiroshi Hiromoto estamos generado una Guía para facilitar este tipo de conversaciones. La hemos llamado #NecesitamosFeedback.
La comparto acompañada de un pedido: Por favor, al leerla y/o usarla, nos gustaría que nos dieran feedback. Sí, sí: ¡Nosotros también #NecesitamosFeedback! 🙂
Hiroshi también escribió al respecto de este tema. El artículo se llama «Por qué en las organizaciones necesitamos feedback» y forma parte de su blog «Scrum Orgánico».
A partir de los comentarios que nos han hecho llegar desde la primera versión que publicamos, la Guía ha evolucionado. Muchas gracias a tod@s los que aportaron su granito de arena con preguntas, ideas, sugerencias y también con difusión.
¡Todos #NecesitamosFeedback!
Disfrutando el camino, Ágilmente 
El escrito anima a dar feedback! Muy bien, me gusto mucho.
Gracias Sara! Espero que nos cuentes cómo te fue (tanto si usás la guía como sin ella) 🙂
Hola Pablo, ta bueno el articulo, a decir verdad esperaba que hablaras sobre técnicas para obtener feedback, me gusta que invites realizar mejora continúa en todos los ámbitos seguro y siempre encontramos que mejorar en el diario vivir, yo te pediría que en una futura entrada nos mostraras algunas formas de obtener feedback que a ti te hayan funcionado, un abrazo
Gracias Camilo! Tal como hablamos por Telegram luego de este comentario tuyo, hagamos juntos un webinar sobre este tema… 🙂
Hola Pablo, muy buena tu guía. Creo que para dar feedback hay que estar bastante entrenado porque es un tema delicado. Hay que poder entrar en sintonía con la otra persona y tener clara la diferencia entre el feedback y la evaluación, ya que esto muchas veces se confunde (especialmente en el trabajo y cuando el que te feedback es tu jefe). Hay que practicar!
Gracias por tu aporte, Ruth!
Coincido con vos: es un tema delicado… Creo que debemos tener «tacto» y plantear el feedback de una forma respetuosa.
Peeeero… si esperamos a estar entrenados para dar feedback, entonces nunca daremos feedback hasta que no estemos entrenados.
Sugiero que vayamos aprendiendo en el camino, empezando con la gente más cercana, con la que tengamos más confianza!
Hola Pablo,
interesante post. En mi opinión la clave es ser capaces de poner a disposición de los demás canales y medios para favorecer ciclos de retroalimentación. Y por supuesto tener una guía de buenas prácticas como la vuestra para saber cómo dar y recibir feedback.
Te dejo enlace a un post que publiqué hace tiempo orientado a la gestión de expectativas en un entorno de dirección de proyectos. 😉
http://hands-on-pm.blogspot.com.es/2012/06/la-retroalimentacion-en-la-gestion-de.html
Un cordial saludo!
@joan_barcelo
Gracias por leer y comentar el artículo Joan, miraré tu post! Saludos!!